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Pablo Rotchen, alma y corazón del segundo título albiazul, contó a ONCE que tiene un deseo especial: "Dirigir al Monterrey". Charla imperdible con La Roca.

Por Adrián Maldonado | FOTO:

Jueves 04 de junio de 2020

Pablo Rotchen fue un central intimidante y eficiente, cualidades que lo hicieron clave en el campeonato de Rayados en el 2003. Pero ni el paso del tiempo, ni la distancia lo hacen olvidar al equipo y la ciudad, incluso forman parte de su sueño: "Dirigir al Monterrey".

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Hace tiempo que el argentino no se mostraba ante los medios como lo hizo ahora con ONCE.

Rotchen recordó su etapa en Rayados y lo hizo acompañado por su camiseta de juego con el 4 en la espalda. Unos 17 años después la volvió a usar para ponerse a soñar con dirigirlos. Admitió que le gusta el estilo de juego de Miguel Herrera, aunque también tiene grabados conceptos de futbol de César Luis Menotti. Sólo espera la llamada y sin pensarlo venir a la ciudad, tal como le tocó en su época de jugador.

El aficionado recuerda a La Roca por haber sido un central de excesiva garantía y dar la cara por la defensiva del Káiser en aquella Final contra Morelia. Los recuerdos siguen vivos y frescos en su memoria como el Clásico Regio de las Semifinales, lo que le dijo a Kléber en el penal y hasta lo extraño que fue su retiro vistiendo de azul y blanco.

"En un futuro voy a ir a dirigir a Monterrey. No ahora porque tiene un gran entrenador (Antonio Mohamed) ni en dos años, pero estoy convencido de que voy a volver en algún sentido. Mi hija (Alegra) también necesita conocer su ciudad. Ahí estaremos en un momento", reveló por videollamada desde su hogar en Barcelona, donde ha pasado los últimos seis años.

"Fue una gran decisión la que tomé de ir a México y mejor todavía de ir a Monterrey. Me enorgullece ser parte de la historia del Monterrey, llegamos en un momento justo e idóneo, hicimos algo grande que quedó para el recuerdo y eso es imborrable", dijo el central.

¿Qué te falta para dirigir a Rayados?

"Uno nunca deja de aprender. En cada entrenamiento y temporada hay cosas que a uno lo ponen a prueba para resolver y sobretodo cuando eres cabeza de grupo. Todos los años, llegadas tardes, situaciones, buenos y malos partidos. Siempre hay cosas para seguir aprendiendo".

Pablo Óscar, rayado entre 2002 y 2005, es segundo entrenador en la Tercera División de España con el club Fundación Damm, formando jóvenes Sub 19 desde hace dos años, con la confianza de estar en la tercera mejor cantera de la región detrás del Barcelona y Espanyol. En 2005, cuando se retiró, comenzó el curso de DT y lo terminó en 2008 en su país hasta que decidió buscar una mejor calidad de vida en Europa.

Fue una gran decisión la que tomé de ir a México y mejor todavía de ir a Monterrey. Me enorgullece ser parte de la historia del Monterrey.

Pablo Rotchen, ex defensa de Rayados

¿Con qué estilo te identificas?

"Me gustó mucho el estilo de Miguel Herrera, me sentí identificado. Tuve la suerte de tener de entrenador a Menotti en Argentina y cuando me retiré del futbol íbamos a cenar con él y hablábamos de táctica".

¿Cómo jugarías?

"Depende de los jugadores que tú tengas te vas a amoldar a tu sistema táctico y por más que tú tengas una idea, no tienes a los jugadores y puedes hacerlo, pero no encaja a tu gusto. Hay que primero poner nombres y después hacer el sistema táctico".

SU RETIRO

¿Por qué te fuiste?

"Fue medio extraño porque no sé qué pasó ahí. Nadie me dijo que no continuaba, ni la directiva, ni el entrenador. Me enteré por un periodista que me llamó. Al final eso fue lo más triste, porque de haberse uno brindado tanto al menos que te digan sinceramente 'Pablo, no queremos que continúes'. Eso fue lo que más me dolió".

Jugabas, eras titular y de pronto desapareciste...

"Yo no hubiera hecho eso, pero hay que ver la situación y todo. Veníamos muy bien y después de un campeonato y un subcampeonato decirme que no continuaba, era difícil. Retirarme no lo tenía planeado, en Monterrey me hubiera gustado jugar un año más, pero estaba lastimado de la rodilla, tenía mis cuidados y después el doctor me aconsejó que descansara y ese momento de unos meses se hicieron para siempre".

¿Te quedó algún resentimiento?

"No. Es más, una vez me crucé con Miguel en la cancha de Independiente y era justo el último partido antes de la renovación del estadio. Cuando iba caminando por la grada me gritaba y el único asiento vacío que había en todas las gradas era al lado de él. Voy, lo saludo y ahí estuvimos charlando. Después hizo la carrera y me puso muy contento. No hay rencor ni mucho menos, tengo un gran aprecio por el club en mi corazón".

¿Ves al Piojo dirigiendo en Europa?

"Acá está (Javier) Aguirre, lo hizo muy bien y lo quieren mucho. Al Turco no le fue bien en el Celta, pero aquí en el futbol español tratamos de imitar lo que se hace en México hace 30 años, que es la salida de balón como lo hacía (Ricardo) La Volpe y Miguel Herrera. Tranquilamente lo puede hacer acá, el tema son los jugadores que tiene".

EL TURCO Y EL TÍTULO DEL 2003

¿Sigues al pendiente de Rayados?

"Me puso muy contento por el Turco porque lo conozco, fuimos compañeros en Independiente y sé lo que era para él salir campeón con Rayados. Lo disfruté mucho y me emocionó un montón cuando en la tanda de penaltis ahí estaba en el banquillo llorando. Cualquiera hubiera pagado para que el Turco fuera campeón"

Como tú en Morelia...

"Cuando tienes un buen sistema y buenos jugadores, la cosa cambia. Se juntaron muy buenas individualidades que en su momento eran casi lo mejor de la Liga. Íbamos ganando 3-0 muy bien y al final el toque de atención (gol) del Bofo (Adolfo Bautista) estuvo bueno, porque nos dijo que eso no estaba terminado. Nos fuimos convencidos que lo podíamos hacer y no podíamos dar ventajas en el partido de Vuelta. Estuvimos bien defensivamente y (fue) merecido".

¿Qué decir del festejo?

"Tanto tiempo de espera desde el '86 se vio reflejado en la calle. La gente salió con todo desde el Aeropuerto que nos recibieron, con todo el camino, en cada puente había gente y fue increíble. Nunca lo había vivido. En la Macroplaza, que después se llenó muchísimas veces más después, fue el puntapié inicial de un lindo camino que tiene el club y espero que lo siga teniendo".

Tienes una buena amistad con Guillermo Franco. ¿Qué le recuerdas?

"Estábamos en El Cerrito y me decía 'Pablo, mi sueño es jugar la Champions'. Hizo todo por jugarla y me acuerdo que lo veía en el Villarreal jugando la Champions y dije: 'este cabrón lo logró'. Hay que proponérselo".

EN EL TOP ALBIAZUL

La gente piensa que eres uno de los mejores centrales del club...

"Me hace sentir muy contento de haber tomado la decisión de ir a jugar a Monterrey. Ver que perdías un partido y que la gente estaba afuera esperando para que le firmes un autógrafo eso no es normal ni en Europa, ni en Argentina. La gente apoyaba, a veces perdíamos un partido 3-0 y cuando en otro lado te dicen de todo, la gente estaba afuera y decía 'no pasa nada'. Uno se sentía en deuda".

¿Tienes contacto con la gente de Rayados?

"No hablamos. Si me llaman, encantado estaría de ayudar en el tema de formación o lo que sea. Muy bien le va la cosa como para que me llamen a mí (risas). Los felicito por lo que están haciendo. Va todo muy bien, no tienen que cambiar nada. Uno siempre tiene el corazón al club dispuesto a ayudar, pero no hace falta cambiar nada. Está muy bien".

Y KLÉBER

¿Qué le dijiste a Kléber en el penal de la Semifinal?

"Venía escuchando el video y me reí. Veía la imagen mía, cruzado de brazos y con el pelo largo. Todos me preguntan que qué le dije, pero no te lo voy a decir (risas) (N de R: "¿Seguro que lo vas a patear vos? no lo vayas errar, mira que estamos en una Semifinal, pégale fuerte"). No es secreto, no fue una falta de respeto ni mucho menos. Fue algo para desconcentrarlo y ponerlo un poco nervioso, pero no fue un insulto, fue una charla que tuvimos".

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Fotografía: Cortesía Pablo Rotchen

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