Lunes 20 de septiembre de 2021

Los golpes hacen más fuertes a quien los recibe, y para medirse a los gigantes, en el Tri Femenil tienen claro que es el momento de aguantarlos. Para Emily Alvarado, una que sabe de qué se trata vestir la playera de México (tiene 23 años y ya jugó cinco Mundiales), ese es el camino para soñar en grande alguna vez. “Si queremos ser las mejores, tenemos que jugar contra las mejores", le reveló a ONCE. Este martes, desde las 19:00, la Selección se prueba ante Colombia.

Cualquier futbolista, para poder llegar a jugar en Primera División, además de la cuota importante llamada talento, también necesita una pizca de suerte. Para que lo llamen, vean, seleccionen, convoquen, no se lesione... Todo eso llegó en un combo para la nacida en El Paso, Texas, que equivocó el horario de una prueba de la Selección Nacional cuando tenía 14 años, jugó con la Sub 17, metió un gol de arco a arco y empezó una carrera que ahora aterrizó en Francia. “Todo pasó muy rápido”, confesó. 

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El amor de un padre o una madre no tiene comparación, pero el del futbolero no conoce los límites. Leo, papá de Emily, fue futbolista toda la vida, y su hija cumplió el sueño de hacerlo profesionalmente. Claro, él fue el encargado de construir cada peldaño de la arquera: fue su entrenador, creó un equipo femenil para ella y su hermana, y fue un pilar fundamental para acompañar esa suerte que la guardameta de la Selección tuvo durante mucho tiempo.

Una charla desde los inicios en El Paso hasta esta actualidad en el Reims. La portera, quien vio el debut de Lionel Messi en el PSG, no se calló nada. Sus ídolos (incluida una compañera), el grupo que se formó en la Selección, las ganas de jugar alguna vez en la Liga MX, el sueño de un nuevo Mundial -sería el sexto de su carrera- y hasta el apodo que le pusieron en su familia.

FORREST GUMP 

Cuéntanos un poquito tu historia… 

“Nací en El Paso, Texas, en la frontera de Texas y Ciudad Juárez. Empecé a jugar futbol desde los 3 años, mi papá fue futbolista, entonces cuando empecé a caminar me puso en un equipo. Jugué con el club de mi papá, él formó un equipo para mi hermanita y para mí, porque no había en El Paso”.

¿Era mixto o solo femenil?

“Únicamente femenil. Él fue mi entrenador por mucho tiempo, a los 13 o 14 años había una visoria en Juárez para la Selección. Yo también jugué con la selección de Chihuahua, mi entrenador me mandó un mensaje y me dijo que íbamos a tener una visoria, si podía ir. Claro, ahí estuve, pero me equivoqué. Fui a la visoria para la Sub 20, y yo tenía 14 años. Era para Sub 17, ni modo, me metí y jugué. Metí un gol de despeje”.

Pasando en limpio. ¿Fuiste con 14 años a probarte en la Sub 20 y metiste un gol de arco a arco?

“Sí. Estaban Christopher Cuéllar, Mónica Vergara... Ella me captó. Ahí es donde me vieron. Me preguntaron si tenía la doble nacionalidad, pasaporte. Les dije que sí, una semana después ya estaba en un avión para la Ciudad de México y fui a un torneo de Cuatro Naciones en Costa Rica con la Sub 17. Todo pasó muy rápido”.

De estar jugando en el equipo que creó tu papá, a la Selección…

“Sí. Durante la preparatoria, traté de buscar otros equipos de nivel más alto, tuve que viajar mucho y estuve jugando en un club en Houston, a nueve horas de El Paso. Estuve viajando, regresando. Cuando tenía 16 años, hablé con los entrenadores de Texas Christian University y me ofrecieron una beca para estudiar y jugar futbol ahí. La acepté y pasé cuatro años y medio ahí. Acabo de terminar por fin”.

¿Qué estudiaste?

“Negocios”.

¿La familia que decía a todo esto?

“¿Ubicas Forrest Gump? Siempre tenía buena suerte, bueno ese es mi apodo en mi familia, me dicen Forrest Gump. Fueron muchos años de sacrificio de mis papás, mis entrenadores y mío también. Fue difícil, pero me dieron muchas oportunidades de representar a México”.

DESTINO DE SELECCIÓN

El camino estaba allanado y, como contó, el Tri Femenil estuvo siempre ubicado en el rumbo de su vida. Así lo demostró, porque con apenas 23 años tiene cinco participaciones en Copas del Mundo en su espalda. Categoría Sub 17, Sub 20 y hasta la Selección Mayor. Otro descubrimiento de Mónica Vergara. 

¿Cuántos Mundiales jugaste en total?

“Jugué cinco. Uno con la Sub 17, tres con la Sub 20 y uno con la Selección Mayor”.

¿Te ves con un sexto?

“Sí, creo que sí”.

¿Te motivan las Eliminatorias después de tanto tiempo sin jugarse?

“Sí, jugar un Mundial o Juegos Olímpicos es lo máximo, lo vamos a pelear con todo. No clasificamos a los últimos Juegos o el Mundial y nos dejó un mal sabor de boca. Entonces estamos emocionadas y motivadas para salir y enseñar que estuvimos trabajando los últimos cuatro años. El equipo va a estar listo para pelear”.

¿Es un alivio el número de equipos que irán al Mundial? Se incrementaron los cupos.

“Ayuda un poco, pero es un boleto a un Mundial, todos van a pelear, van a querer ir. Aumenta la presión un poco más también”.

¿Qué tiene de diferente este grupo de Selección? Jugadoras, cuerpo técnico...

 “Es un grupo más motivado, Moni (Vergara) es una gran líder y siempre nos está motivando, tratando de darnos consejos y ayudar para que podamos dar pasos adelante. Muchas de la selección nos conocemos desde hace mucho, pero la dinámica del grupo cambió mucho. Todas están motivadas y listas para luchar y tratar de avanzar el nivel de futbol en México”.

¿Cambió el clima en el plantel? ¿Todas se llevan bien?

 “Sí, claro. Todas nos llevamos con todas. Estuve en la Selección por mucho tiempo, desde el Mundial de 2015 y desde allí vi muchos cambios en la Selección en la dinámica del grupo”.

¿Está complicada esa competencia del puesto de la Selección?

“Sí, todas son buenas, pero me encanta la competencia. Todas nos llevamos muy bien, son mis amigas, tratamos de sacar lo bueno de todas. Es mucha competencia, pero de eso vivo”.

Los resultados de amistosos, ¿cómo los tomaron en el grupo? ¿Un golpe de realidad o un aspecto positivo? Por la calidad de los rivales…

“Siempre es difícil perder, especialmente cuatro o cinco a cero. Duele mucho, pero es un grupo muy unido y tratamos de aprender de esas derrotas. Jugando otros partidos, contra otros países y ganando siete u ocho a cero, no ayuda a nadie. Si queremos ser las mejores, tenemos que jugar contra las mejores. Falta mucho trabajo, pero vamos en buen camino para seguir creciendo y llegar a esos niveles, porque estos tipos de resultados no cambian de una noche a otra. Es un proceso muy largo. Todas están dispuestas a hacer el esfuerzo y llegar a esos niveles”.

¿Son los sacrificios necesarios para codearse con esas potencias?

“Sí, claro. Esos tipos de partidos nos ayudan a ver dónde estamos. Tenemos claro en que tenemos que trabajar y también tenemos mucha confianza en Mónica y el cuerpo técnico, que nos van a ayudar y guiar en esos niveles”. 

¿Se criticó injustamente a esta Selección durante el último tiempo?

“Sí, siempre va a haber comentarios, es válido criticar. Pero creo que este equipo está tratando de enfocarse en lo propio y lo que está haciendo como grupo, tratar de no escuchar comentarios de afuera”. 

¿Tu mejor atajada con la Selección?

“Fue un tiro libre contra Corea en el Mundial Sub 20 de 2018. Afuera del área, iba a meterse en el ángulo y no sé cómo la saqué, ni vi el balón, pero fue como un instinto. Me tiré y la toqué y no entró. Me paré como de qué estaba pasando y siguió la jugada, entonces me tenía que enfocar otra vez”.

¿Y una que quieras olvidar?

“Tengo muchas de esas también. En la Selección creo que en el Mundial Sub 20 de 2016, contra Alemania. Salí para cortar un balón, un centro, y no salí bien, metieron el gol. Fue un partido para el olvido, casi ni recuerdo la jugada”.

PRESENTE Y FUTURO

Emily Alvarado transita su mejor camino como profesional: la fichó el Stade de Reims, ya debutó (vs. Lyon) y tuvo su segundo partido en el empate 0-0 contra Guingamp. Con la curva en ascendente, no dejó de soñar con la posibilidad de jugar alguna vez en México. Fiel seguidora de la Liga MX Femenil.

¿Cómo transitas esta etapa de tu carrera en Europa?

“Esta fue una etapa de mi vida muy emocionante, he querido ir a jugar a Europa desde que tenía 10 años. Está pasando y es emocionante. Como siempre, ser llamada a la Selección es un honor. Estoy agradecida por esas oportunidades y muy motivada”.

¿Con qué te encontraste en Francia de diferente?

“Hay muchas cosas diferentes. Primero, el lenguaje, no hablo nada de francés, estuve tratando de aprender para poder comunicarme en la cancha. Casi todo... La comida, la gente, es muy amable, todo es muy diferente, pero me gustó mucho”.

¿Cómo es el nivel que viste en los entrenamientos respecto a lo que viviste en Estados Unidos?

“El futbol europeo es diferente al de Estados Unidos. Allí es directo, físico, aquí es más bonito, jugar al futbol y tener posesión del balón. Esa fue la mayor diferencia que vi. Jugando aquí en Europa me va a ayudar en la Selección, es el tipo de futbol que tratamos de jugar en la Selección”.

¿Ves mucho la Liga MX?

“Trato de ver, pero casi nunca puedo ver los partidos, pero me meto”.

¿Quieres decir a quien le vas?

“No puedo decirlo, tengo muchas amigas en muchos equipos y me castigan (risas)”.

¿Fue campeón ya el equipo?

“Sí”.

¿Te dan ganas de jugar viendo todo lo que viven?

“Claro que me motiva, después de mi carrera en Europa me gustaría ir a México. Quiero tratar de ver diferentes países, aprender diferentes culturas y en unos años ojalá me dé la oportunidad de jugar en México, me encantaría. Se ve súper padre con toda la gente en los estadios”.

¿Quién es tu ídolo o ídola?

“Tengo muchos. Ochoa, Casillas, Buffón. También porteras de Selección como Ceci Santiago, me ayudó muchísimo, aprendí mucho de ella. Es una de mis buenas amigas, también Hope Solo, tengo muchísimos. Siempre trato de ver la mayor cantidad de futbol posible. Me encanta, y creo que el nivel de futbol femenil creció mucho los últimos años y me encanta ver los partidos, la emoción, la garra de las jugadoras y todas son mis ídolas”.

¿Un deseo? ¿O desafío?

“Muchos. Trato de tomar todo paso a paso. Como vienen las Eliminatorias, quiero con todo mi corazón que clasifiquemos y que hagamos un buen papel, que sigamos tratando de subir el nivel de futbol en México”.

Fotografía: Tri Femenil