Lunes 20 de junio de 2022

En el mundo de las redes sociales, donde algunos opinan sin saber o sin dar la cara, mucho se comentó de una “mala relación” entre Roberto Medina y el plantel de Tigres Femenil. Más del 50 por ciento de los nombres que hoy forman el club felino fueron descubiertas o llegaron en el proceso de Beto como DT. Incluso, mucho se habló sobre el cómo se dio la salida de Katty Martínez. ¿Fue culpa de Beto? El propio DT lo aclaró.

Cuando un grupo de trabajo tiene a personas de tanto carácter, los roces se vuelven parte de la normalidad. Y Beto perdió a ese escudo que calmaba las aguas y mantenía todo en un hábitat natural muy tranquilo: Karina Báez. Ni Regina Vivanco (por falta de tiempo) ni Adolfo Cadena (por una cuestión normal de género), los dos auxiliares posteriores, pudieron llenar ese hueco desde lo sentimental. “Siempre dije lo que pensaba”, tiró Beto, en la segunda parte de su charla con ONCE.

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La gente habla mucho en redes y dicen que el plantel no te quería. ¿Cómo era la relación?

“Siempre hubo una relación muy buena y de respeto. Todas esas cosas sería caer en chismes, dimes y diretes. Puedo entender esa parte del profesionalismo, que haya habido quienes no les gustara mi toma de decisiones, pero tengo la tranquilidad de decir que siempre que tomé las decisiones, fue pensando en lo grupal y sacar los resultados para el equipo”.

¿Así fue siempre no?

“Así fue desde el primer día. Ahora se desvía a esa parte porque no se consiguieron los resultados. Pero si ves desde el primer día, siempre hubo rotación, dosificación, tener a todas en el mejor momento. Caer en esa parte, sería caer en chismes. Si hubo algo de parte del grupo, yo fui frontal, siempre dije lo que pensaba. Y si hubo quien no quiso venir y hablarlo conmigo, queda en la conciencia de cada quien”.

¿Cuánto perdiste con la salida de Karina Báez? En tema relación con el grupo.

“Hubo una pérdida lógica, que se trató de sustituir en el primer torneo y no pudimos hacerlo en el segundo porque Vivanco tomó la responsabilidad del equipo Sub 17, con esa obligación de la Liga de tener alguien femenino en el cuerpo técnico. Claro que se perdió mucho de esa parte de comunicación, de lo que es el vestidor un poco, sobre todo, para poder sentir un poco mejor el plantel”.

¿Cadena tuvo poco tiempo para llegarle a las jugadoras?

“Lo que pasa que la conexión con un hombre no es lo mismo dentro de la cancha. Con Karina (Báez) tenía la posibilidad que ella entre al vestidor, tenga el termómetro y temperatura de las reacciones de las jugadoras. Al final, fue siempre de gran ayuda”.

¿Por qué no jugó Mercado los últimos partidos?

“Nadie dice las cosas como son. Pero Mercado, antes del partido de Atlas, tuvo una semana que estuvo muy enferma de su estómago. Obviamente, a mí me demanda, para un partido de Liguilla, pensar en la que esté mejor físicamente. La noche previa a ese partido se la llevaron al hospital. Necesitaba poner alguien que estuviera al cien por ciento. Regresó par el segundo partido, para ver cómo estaba, darle ritmo. No la vimos al cien por ciento y por eso mi decisión para los siguientes dos partidos. Pero, pensando exclusivamente en lo que yo creo, que era tener al equipo lo mejor físicamente”.

La mitad del plantel la descubriste o trajiste tú a Tigres…

“A varias las integramos en mi período, muchas crecieron en mi gestión, me deja tranquilo eso. Si haces un análisis individual, te das cuenta que tuvieron un crecimiento. Eso es lo que a uno le da satisfacción, ver que las individualidades crecen y eso se lleva a lo colectivo. En el análisis deportivo, también”.

¿Entonces, qué pasó?

“El último torneo, el más cuestionado o criticado, se habla que venimos a menos. Sin una pretemporada, con mucha carga de seleccionadas, con la cantidad de partidos ganados, pero aún así nos mantuvimos invictos, llegamos a una Semifinal. La paloma que me doy como gestionador, es haber dosificado bien, rotado bien, tratado de mantener a las jugadoras lo mejor posible. También tenía en claro que podía venir alguna lesión por esa falta de una buena base deportiva y la carga extra que traían muchas jugadoras. Se reflejó hacia el final del torneo, lastimosamente”.

Me voy a meter en el chisme. Pocas jugadoras te saludaron públicamente. ¿Por privado lo hicieron?

“Sí, públicamente un par de jugadoras, pero por privado sí, varias jugadoras. Eso me deja tranquilo porque sé cómo era este plantel”.

EL APUNTADO

El quiebre entre Roberto Medina y la gente llegó después de la segunda Final perdida ante Rayadas. ¿Por la derrota? Más allá de esa pérdida, la de Katty Martínez dolió más. La goleadora se marchó al América y todos señalaron al DT como el culpable. Él mismo se encargó de aclarar lo que ONCE contó hace un tiempo…

¿Quieres contarle a la gente que no tuviste nada que ver con la salida de Katty?

“¿Otra vez? No lo entienden porque les sigue ganando el amor de no ver a su jugadora, y el responsable inmediato es el DT, pero bueno, sigo insistiendo, no tuve nada que ver en la salida, solamente se me informó, di mi punto de vista y creo que no fue una sola parte en la toma de decisiones de la directiva, también hubo cosas en las decisiones de Katty. Yo sé que tres meses antes de que se diera esto, el club estaba todos los días buscando su renovación. Uno como DT pujando también, y si ella es honesta, se acercará y dirá la verdad de cuántas veces me acerqué a tratar de decirle o convencerla de que buscara renovar. Incluso, aconsejándole otros tipos de opciones para llegar a lo que quería”.

Se fueron Katty y María, llegaron Uchenna y Mia. ¿Te faltó tiempo para que le agarren la mano completamente?

“Sí, claro. Sí y no. Sí, en el modelo de juego. ¿Y a qué me refiero? Lo que a mí me gusta, cómo un equipo tenga la posesión, cómo llega estructurado al último tercio, y eso lo teníamos bien trabajado con Katty y María. No se adaptaron en esa parte. Cuando las necesitábamos más cerca que corriendo hacia el frente. Y sí se adaptaron en ser productivas, metieron 10 y 11 goles. Fueron un beneficio, porque hicieron un montón de goles, contando los de Liguilla, más no en lo que a mí me gustaba, que era lo que muchos me criticaban, que no se veía bonito el equipo, que perdía mucho la pelota”.

¿Entonces qué les faltó?

“El equipo estaba tan acostumbrado a llegar asociado que, cuando llegan características de jugadoras que llegan mucho a los espacios, de repente, nuestras otras jugadoras no estaban acostumbradas a tirar esa pelota al espacio y había un poco de esa falta de coordinación. Normal, pero que la fuimos generando y ganando hasta que pudiéramos ser tan eficaces como lo hacíamos antes. Pero en esa parte de entender que hay otras maneras de poder generar, sí se adaptaron, porque fueron muy productivas en goles”.

¿Tenías visto refuerzos y todo?

“No, estábamos apenas esperando. Es difícil estar hablando y pensando en refuerzos cuando estás compitiendo para un campeonato. Tienes tantas cosas en la cabeza”.

Pero a Uchenna la trajeron en plena Liguilla…

“Sí, pero porque ya se sabía lo de María Sánchez, que esa es otra cosa. Ya sabíamos que María no quería renovar porque a fuerza quería irse al Houston Dash. Entonces, ahí sí se puso las pilas con anticipación para que estuviera desde el inicio y sintiera una Liguilla y el grupo”.

LO QUE PUDO SER

Entre tantos planes, en la cabeza de Beto siempre estuvo la de “internacionalizar” a Tigres Femenil. Así lo dijo el propio Medina en diciembre de 2020, luego de haber sido campeón del Guardianes de ese año, con esa definición por penales contra Rayadas. Las felinas ya lo hicieron con él en el banco, pero ahora enfrentarán al Ángel City en Estados Unidos y Moscato planea llevarlo a Europa.

Siempre hablaste de la internacionalización del equipo. Tigres, Rayadas, América, todos tienen amistosos. ¿Se termina dando todo eso?

“Sí, son muchas cosas. Toda esa experiencia y perfil que traigo desde hace muchos años en selecciones nacionales, y la necesidad que tiene nuestro futbol mexicano de tener fogueo con otros tipos de Ligas más competitivas para el crecimiento, desde que llegué a Tigres, siempre buscaba o propuse, o traje, posibilidades de partidos en Estados Unidos. Que luego no se dieron por calendarios, fue otra cuestión, pero siempre esa fue la idea desde que llegué, que proponía para el club”.

¿Te arrepientes de algo?

“No, de nada. Me siento muy tranquilo con mi gestión, al final, si analizas los números de uno como DT y lo que pude ayudar en el crecimiento individual, soy feliz. Te sumo dos cosas más: a Cristina Ferral y a Greta Espinoza, cuando llegué, no las tenían contempladas para Selección Nacional, y ahora son dos jugadoras más que se sumaron. A lo que voy, no las volteaban a ver para Selección Mayor, y a medida que fue avanzando la gestión las empezaron a convocar. Lo que quiere decir es que hubo cosas buenas que vieron de crecimiento en ellas”.

MAYOR, SU DEBILIDAD

Uno de los mejores refuerzos que llegó a la Liga, por su calidad y la productividad que representó para su equipo, fue Stephany Mayor. La delantera arribó a Tigres Femenil en 2020 y rápidamente se echó el equipo al hombro. Con el Premundial a la vuelta de la esquina, el ex DT auriazul sabe cuál es la clave.

¿Vas a seguir el Premundial?

“Sí, claro. Me seguiré preparando, tengo armado un mes en Europa para checar un par de cursos que haré por allá. Para mí es importante seguir viendo futbol femenil”.

¿Le ves pasta para hacer algo a esta Selección? Todas jugadoras de la Liga son.

“Esa es otra cosa que nadie dice, cuando yo era seleccionador, nosotros nada más teníamos 15 o 20 días, una o dos giras en el semestre para preparar y conocer nuestras futbolistas, ponerlas en forma física, buscar desarrollo técnico, la parte táctica. Lo que hablé hace muchos años, es que la Liga le iba a venir bien a los seleccionadores, porque no iban a tener que perder tiempo poniéndolas a tono físicamente o cuestiones técnicas, agarrar experiencia en Liguillas, la presión del público, todo eso fue un cumulo de puntos que vinieron a sumar a nuestra selección. Tiene muchas más herramientas y armas para pararse en partidos internacionales que como vivíamos hace cinco años”.

¿Qué jugadora es tu debilidad en la Selección?

“Stephany Mayor y Alicia Cervantes. Licha tuvo un crecimiento extraordinario, hay que darle una palomita a los clubes por los que pasó, la potencializaron. Una jugadora que siempre tuvo condiciones y cuando se potencializó su físico, fue extraordinaria”.

Hablando de Mayor, si hubiera estado en mejor forma, ¿era otro el final de este torneo?

“Todos los futbolistas tienen sus altibajos. Te puedo decir que para nuestro plantel ella era fundamental, aún sin estar en su mejor forma, por cómo se mueve, por lo que atrae del rival, por cómo lleva la pelota aún no esté en su mejor forma deportiva. Si te pones a analizar la cantidad de minutos en los últimos dos años, y sin una base que no le dan el valor a lo que significa tener un descanso y luego una pretemporada, porque ayuda al organismo a recuperarse de molestias, de fatigas, y luego darle una forma física, cosa que no tuvo Mayor los últimos dos años”.

Y no la va a tener, porque está en Selección ahora…

“Así es. No sé qué estén trabajando en Selección, seguramente harán una base, pero están dándolo todo para iniciar un torneo”.

Roberto Medina se tomará un break para pasar el trago amargo que fue dejar a Tigres, pero prometió volver por más, siempre y cuando haya una oferta que le permita crecer como entrenador.

Fotografía: Mexsport