Sábado 12 de noviembre de 2022

Dicen que nadie es profeta en su tierra y Jacqueline Ovalle lo puede confirmar. Desde Aguascalientes emigró a Nuevo León para cumplir su sueño de vida: jugar a la pelota y no le ha ido nada mal.

Sin importarle el futbol antes, la nacida el 10 de octubre de 1999 llegó con su maleta, llena sueños por cumplir para vivir en la casa club de las felinas, dispuesta a demostrarle a su hermano que "podía jugar", según contó a FIFA tiempo atrás.

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INICIOS CON LA BOCHA

Su aventura comenzó en las selecciones estatales de su lugar de origen. La conducción y zurda privilegiada llamó rápidamente la atención de los ojeadores de la mismísima Selección Nacional, con lo que puede presumir haber disputado ya una Copa del Mundo Sub 17 y Sub 20.

Como todo proceso, los baches estuvieron presentes hasta que Jaqueline, como miles de futbolistas actuales, encontraron una oportunidad y la plataforma ideal en 2016, cuando a fin de año se anunció la creación de la Copa Liga MX Femenil.

Ovalle, visoreada por clubes como Chivas, Pachuca e incluso, Rayadas, estaba en la Copa Telmex cuando un ex entrenador albiazul se le acercó y le mostró interés para que se uniera a su equipo.

La falta de referencias y caras conocidas en el equipo, le hizo decantarse por Tigres, donde había futbolistas con las que antes había compartido selecciones menores y ahí, comenzó su romance con el azul y amarillo.

SU FAMILIA

En ese inicio de las ahora auriazules estuvo la que ella califica como “su mejor dupla”: Katty Martínez. Hay cosas que nunca se olvidan y en los anales del campeonato azteca estará el recuerdo de la fórmula mágica: Liz asiste y Katty anota.

En una entrevista con ONCE, la volante externó que, además de Martínez, una de sus acompañantes favoritas estaba en la lateral por su lado, siendo en su momento Selene Cortés (hoy en Pachuca) y Natalia Villarreal.

"Son unas jugadoras que me entiendo muy bien, sabemos si voy para adentro, que ellas van a ir por afuera. Tenemos esa esencia que ya sabemos lo que vamos a hacer. Son mis acompañantes", mencionó en aquella ocasión.

Sin embargo, La Maga ha hecho un trinomio perfecto con sus 'madres' Stephany Mayor y Bianca Sierra. La acogieron como su 'hija' y constantemente están juntas, tanto en el equipo, así como cuando van a Selección. Esos vínculos comenzaron cuando la pequeña Jacqui compartía convocatorias y les preguntaba sobre cómo era el futbol en Islandia.

UN FUTBOL DISTINTO

Haber conseguido cuatro títulos con Tigres Femenil no le quita el hambre a la zurda, al contrario, mantiene sueños intactos, uno de ellos: jugar en Europa.

Por crecimiento personal y por supuesto, futbolístico, Lizbeth quiere emigrar hacia el futbol español, pues es una aspiración personal y quiere probar algo diferente.

Aunque hubo acercamientos con un club del Viejo Continente, ninguno fue directamente con ella o su representante, sino entre instituciones.

Recientemente, firmó un nuevo vínculo con las auriazules, siendo esta su segunda renovación desde que está en San Nicolás. Sin embargo, también existió la posibilidad de migrar a Estados Unidos con el Houston Dash.

Como si el destino hubiera predicho que el movimiento no se concretaría, Ovalle recordó con ONCE el gol que le clavó a las texanas, el del primer partido y que gritó con todo, pues representaba un avance mental para ellas, demostrarse a sí mismas que no solo eran las poderosas de la Liga MX, que podían medirse a quien sea.

AMANTE DE LIGUILLAS

Los jugadores de peso aparecen en los momentos críticos, una de ellas es la atacante de 23 años, quien se consagró como ‘Miss Finales’, pues anotó en seis de ocho juegos de esta categoría, siendo la máxima anotadora en esta instancia.

Siempre que Tigres la necesitó, la hidrocálida dijo apareció. A pesar de ser volante por naturaleza y que su intención es asistir más que anotar, tiene una cifra nada despreciable de goles.

Su ahora DT lo dijo en la conferencia de prensa luego de su golazo en el Azteca, a nadie sorprende este aprovechamiento de momentums, pues Jacqueline es así.

"Esta es una ocasión para que las jugadoras especiales hagan cosas especiales y Ovalle lo ha estado haciendo toda la temporada, así que esto no debería ser una sorpresa para nadie”, enfatizó la canadiense.

Y bueno, sus 20 tantos en Liguilla le dan pie a su nombre, a una de las figuras más longevas de Tigres Femenil, a su Maga.

Imagen: Daniela Villarreal