Tigres Femenil Alejandra Gutiérrez  Mundial Sub 17 Mundial Sub 20 Atlas

Suplió a una portera y paró un penal. Desde ahí, Ale Gutiérrez llegó a Tigres con una carrera terminada y experiencia en torneos internacionales. Ni ella lo imaginó.

Por Adrián Maldonado | FOTO:

Llegar a Tigres fue un sueño para Alejandra Gutiérrez, no sólo por instalarse en la Liga MX Femenil como profesional con el último campeón, sino por poder pulir un trabajo que le costó 14 años alcanzar. Y todo fue un accidente.

La portera que no quería ser portera, sino delantera, comenzó a tomarle un gusto especial a los guantes durante su estancia en un club infantil llamado igual al que defiende ahora en Yautepec, Morelos, luego de cubrir a una compañera lesionada y detener un penal.

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"Todos los porteros en algún momento de nuestras carreras fuimos delanteros", explicó a ONCE entre risas. "Fue hasta en un regional (a sus 13 años) en donde nuestra portera se lesiona y a mí la verdad me gustaba mucho y se me hacía muy interesante.

"Solamente era una portera, habíamos empatado y tocaron penales. Levanté la mano, me acuerdo perfectamente porque paré un penal. Fue una sensación padrísima que como jugadora no la sientes y desde ahí nació mi gusto por la portería", reveló.

Gutiérrez Carillo comenzó a jugar con sus hermanos en una época donde no era nada sencillo involucrarse en una competencia de este tipo, siendo éste uno de sus mayores retos.

"Mi infancia fue jugar con niños, tengo dos hermanos y digamos que por ellos también fue mi gusto al futbol. A los nueve años, todavía no había tanto esta estructura del futbol femenil y era un poquito más complicado en cuanto a los paradigmas sociales que existen sobre ellos", dijo.

Desde aquel día que suplió a Paty, la guardameta que se lesionó, Ale se dio cuenta de sus capacidades. Hoy presume dos Universiadas Mundiales, un Mundial Sub 17 y otro Sub 20 con la Selección Mexicana, más la oportunidad de haberse estrenado en el máximo circuito de la Liga nacional, a un año de su implementación.

Terminó su carrera de Comunicación en Medios en la UDLAP, pero antes ya la había contactado gente de Tigres. No pudo aceptar por su deseo de querer seguir estudiando, más el peso de una beca universitaria.

Ahora que ya debutó en el Apertura 2018, en la Jornada 3 contra el Atlas, la playera 1 se siente agradecida, recordando los sacrificios que tuvo que atravesar desde pequeña.

"Es una bendición, un sueño, un regalo a lo mejor que todo futbolista quisiera y ahorita más como está creciendo el futbol femenil es muy importante. Qué más que estar en el equipo campeón y en el equipo mejor jugadoras tiene a nivel nacional", puntualizó.

Fotografía: ONCE | Adrián Maldonano

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