liga mx femenil rayadas, eva espejo, amelia valverde, entrevista once

La directora deportiva de Rayadas Eva Espejo quiere conquistar algo más que México. Además, destacó el trabajo junto a Valverde: “Un proyecto de mujeres".

Por Gilberto Galván | FOTO: Gilberto Galván

Viernes 07 de febrero de 2025

Fiel a su afición por la lectura y seguir aprendiendo, Eva Espejo hizo un repaso de lo que ha sido su obra escrita al frente de las bicampeonas Rayadas. En entrevista con ONCE, la directora deportiva separó etapas en su recorrido con las albiazules, hojeando y dejando en claro que, con las dos copas obtenidas, no se detendrán.

Aunque Espejo considera esta etapa como “una cita con la historia”, la directiva decidió apuntar en su epílogo que la grandeza de su equipo no debe ser medida por las copas, porque ya las tienen. Ojo, el objetivo máximo es: “Ser las mejores del mundo”.

MIRA TAMBIÉN: Consulta toda la información del Futbol Femenil

PUBLICIDAD NOTAS

“Hemos construido un equipo con presente y futuro. Nos faltarán algunas posiciones para tener todo redondo, pero mi responsabilidad es que el plantel esté con las mejores, que la que llega sea mejor que la que se fue y pensar que lo que hoy estamos viviendo probablemente no podrá seguir existiendo y sosteniendo en el tiempo. Es muy importante decirles a todos, que la grandeza de Rayadas no se mide en esto (en copas), la grandeza está y existe, si después ganamos un tricampeonato, qué mejor, pero nuestro objetivo es ser las mejores del mundo”, externó.

CAPÍTULOS AZUL Y BLANCO

Con los trofeos del Bi a su lado, la ex directora técnica echó la memoria más atrás, llegó al 2021, el año donde “rompieron el muro”. Emocionada al revivir el título conseguido, contó una anécdota sucedida en el Uni, un pilar que construyó lo que hoy son como escuadra.

“Quisiera acordarme del libro donde lo leí, pero es de Pep (Guardiola), lo retoman de una película de un boxeador. Decía que todos los que rompen el muro, sangran, pero cuando se atreven a ver lo que hay después descubren un mundo maravilloso. Había estado buscando que, físicamente en el vestidor del Uni, hubiera algo que las jugadoras pudieran romper… literal romper, pegar, destruir, etc. Les decía que habían ido muchas veces a ese muro, lo han roto, pero ese día era el golpe final y entonces, encontré una caja de dos metros (risas). Rompimos ese muro física y espiritualmente aquel día en la cancha”, dijo.
Espejo habló de la cultura del plantel y de paso, revivió una historia con Katty Martínez cuando la estaba fichando. A fin de cuentas, está con los “pies en el suelo, cabeza en las estrellas y corazón latiendo”.

“Hemos cambiado hábitos. A la misma Katty cuando la invité, le dije: ‘Tú nunca has estado en un vestidor como este, muy seguramente’, es un equipo que entiende que la competencia es necesaria, es algo que nunca había vivido en otro lado y me ha sorprendido profundamente. Es un vestidor maduro, es unido para las travesuras y para lo muy bueno. El ADN de Rayadas no es hacer las cosas de último minuto, que es una cosa muy diferente, es al revés, es luchar hasta el último minuto y no dar nada por perdido. Debería permanecer en el tiempo”, tiró.

Dentro de la visión 2030, apuntan a tener un modelo de juego reconocible. Hubo voces que decían que Amelia Valverde era defensiva y la Final la termina en 4-2-4, con Bernal de 10.

¿Esa es la cultura de Rayadas o qué es?

“Rayadas es muchas cosas, tiene un modelo de juego bastante claro. Cuando dicen que somos defensivas, eh…puede haber diferencias, sí, pero hemos aprendido que a través de diferentes planteamientos se puede llegar al mismo lugar. Entender cuándo sí ir, cuándo no, cuándo atacar, reservar, presionar, hacer bloque. Eso es Rayadas, que pueden transformarse dentro de un mismo juego o temporada, que pueden adaptarse a los entornos, que saben trabajar, aguantar los partidos, acumular y manejar la presión de muchas maneras. Eso es el verdadero objetivo de ellas”, aseguró.

Con la internacionalización de la entidad, la delegación albiazul tocó puertas. En Washington, Espejo y su mano derecha se reunieron con la cabeza del Spirit, el DT multicampeón con Barcelona, Jonatan Giráldez. Ojo, ambas instituciones comparten objetivo: tocar la cima del mundo.

“Jona siempre será un referente mundial. Parte de lo que vimos allá, muchas cosas las compartimos, otras en las que tenemos que mejorar, nuestra manera de fichar a la forma en que lo hacen ellos, hay mucho que aprender. En cuanto al tema físico, el performance y todo lo que se necesita para que una jugadora tenga cabida en una liga como la de ellos. Me daba risa porque llegábamos y le decíamos que había planteado que Rayadas fuera de lo mejor del mundo, cuando me siento con Jonatan y me dice que quieren ser las mejores del mundo, entonces hay muchos que quieren, en este camino, lo mismo”, dijo.

“PROYECTO POR Y PARA MUJERES”

La vida del futbol siempre la recibió bien, pero no le tendía todas las manos que quisiese. Desde la FMF, pasando por Pachuca y ahora en Rayadas, Eva Espejo se abrió puertas por sí misma y, en este 2025, puede presumir de tener un equipo bicampeón.

 Amelia Valverde y Eva Espejo con Rayadas bicampeonas, ¿qué significa eso?

“Uy, mucho orgullo. Si bien, la llegada de Amelia viene a través de un duelo enorme para mí que es dejar las canchas, encontrar una mujer que ha demostrado por qué llegó acá y por qué ha tenido que aterrizar aquí, me llena de orgullo simplemente por el hecho de que es un proyecto de mujeres hecho para y por mujeres. Hemos roto las reglas de muchas maneras, techos de cristal y muchas cosas juntas”, manifestó.

 Tiene menos intervenciones con la prensa, pero recuerdo una donde hablaba de la identidad de ser rayada. Hablo de su mano derecha Daniel Solís, ¿qué representa ella en la estructura y que da al club?

“Daniela viene en la gerencia deportiva. Desde jugadora fue muy inquieta respecto a muchas cosas que sucedían, preguntaba el por qué de algunas decisiones, ha estudiado dos masters... inquieta a más no poder. Me encanta porque ella es quien dijo: ‘Yo no quiero dejar de ser rayada nunca’, se suma a nuestro proyecto y hoy, ella es la encargada, para mí, del corazón de lo que es Rayadas. No solo queremos hacer un proyecto que en Primera sea de renombre, sino que queremos tener a estas jugadoras hechas con el ADN”.

Boletín ONCE