Morir en la raya
18 - enero - 2019
Señores y señoritas, amigos de ONCE…
El reciente nombramiento de Gerardo Martino como director técnico del seleccionado mexicano de futbol levantó algunas críticas, removió algunas fibras sensibles sobre todo de varios aspirantes en este país con merecimientos para asumir ese cargo. De la crítica especializada también, pero probablemente en el contexto general, con la gente de a pie, el aficionado común no le haya caído nada mal que hayan designado al argentino.
Por supuesto que Martino tiene su trayectoria, experiencia, colmillo y varios atributos más; lo que no tiene es el conocimiento de la plaza y del futbolista mexicano, pero siendo realistas, tampoco lo tenía en el contexto del futbol estadounidense y viene de ser campeón en la MLS, como un poco atrás lo fue también, en México, Matías Almeyda recién nombrado por FIFA el mejor DT de Concacaf, luego de ganar una Liga –aunque en forma muy cuestionada, ante Tigres—dos Copas, una Supercopa y una Concachampions… y eso sin “conocer” el futbol mexicano.
Pero más allá de que nos guste o no el nombramiento, Maritno llega en un momento crucial para el Tri…
Llega en una etapa de renovación, donde más de la mitad del plantel debe ser renovado. Muchos no llegarán a Qatar 2022 por la sencilla razón de que ya dieron lo que tenían que dar. Ya no estarán muchos y la chamba de Gerardo será integrar a los nuevos chavos que merezcan ocupar los puestos vacantes, que serán muchos.
¿Tiene material suficiente Martino para integrar un equipo competitivo y aspirar a una clasificación sin sobresaltos en la zona y un potencial quinto partido en la Copa del Mundo o algo más?
No lo creo…
Si con un equipo maduro, con más de una decena de futbolistas jugando en europa, México se quedó en la orilla con Juan Carlos Osorio… ¿en qué se basaría el optimismo si llegará con un equipo casi remozado en su totalidad?
Potencial hay, eso sí, pero tampoco es abundante el talento.
Hay jugadores con cierta experiencia en el profesional, ya con minutos o torneos internacionales en seleccionados juveniles, pero verdes en el tapete profesional de Primera por una simple razón: a los dueños no les importa mucho la Selección, les importa la compra-venta de futbolistas, el negocio, el mercado de ida y vuelta que ofrece el futbol de Primera en México, y no precisamente darles oportunidad a los chavos que pese a todo se vienen abriendo camino a codazo limpio entre tanto futbolista extranjero…
Esto está muy claro. Si permites que cada equipo pueda tener hasta 12 extranjeros, que nadie se queje si no hay producción suficiente de talento nacional.
Ahora, suponiendo, como se ha sugerido, que Martino incorporará extranjeros naturalizados mexicanos a la Selección… lo pueden hacer otra vez, no pasa nada. Ya lo han hecho antes y no ha servido de gran cosa…. ¿o sí?
Me parece que México tendría que morirse en la raya con lo que tiene, con lo que hay, empezando por un entrenador mexicano y con futbolistas oriundos, pero si los mismos dueños obstruyen esa posibilidad, pues entonces pueden seguir por el camino torcido que siempre han caminado…
Total, los dueños del balón son ellos…
Histórico
