Mínimo Semifinales
Martes 12 de noviembre de 2024
Por obligación, por inversión, por plantel, porque los rivales demostraron que no fueron la gran cosa, Tigres y Rayados deben quedar, por lo menos, entre los cuatro mejores.
Sin darse cuenta, los felinos se hicieron un favor a sí mismos con ese empate sobre la hora ante Cruz Azul. El calendario le acomodó el mejor cruce posible.
Rayados se complicó solo, dejó pasar la oportunidad de ganarle por dos de ventaja a un León con 9 jugadores y tendrá que ir a buscar la clasificación de visitante.
Lamentó los puntos insólitos de Mazatlán o Pumas, en ese partido que ni la inercia del Clásico lo ayudó a sacar adelante.
Tigres cosechó más de lo esperado, sobre todo por el rendimiento que mostró el equipo. Perdió el Clásico, pero se repuso a tiempo y maquilló un Apertura 2024 impecable en los números.
La ausencia de Lucas Ocampos será un dolor de cabeza para el entrenador, porque, más allá de Canales y/o Oliver Torres, no tiene otro futbolista con la misma sangre.
Para ser campeón un equipo necesita un arquero salvador, que aparezca en las difíciles y un delantero matón, que se haga cargo. Demichelis no cuenta con ninguno de los dos.
Paunović sí los tiene, pero si no acepta que encontró un 11 que sale de memoria y sigue con las rotaciones insólitas, la Liguilla se lo va a comer.
La diferencia entre Tigres y San Luis luce abismal. No solo en el armado del plantel, también en la jerarquía. Esto es futbol y todo puede pasar, pero no llegar a las Semis invita al DT a irse por sus propios medios.
Demichelis sí podría sobrevivir una ‘mala’ Liguilla. Llegó con el campeonato empezado, ganó el Clásico y mucho tendrán que ver ‘las formas’ en el análisis del Tato. Quedar eliminado a manos de este Pumas no sería humillante, pero sí decepcionante.