¿Cuántas veces le puede esquivar la felicidad a Rayados? ¿Cuántos golpes aguantará una hinchada que recibió uno detrás de otro hace algunos años? Sin embargo, ahí sigue torneo tras torneo. 

“Es la hora” no puede ser usado como algo de marketing, se trata del ahora o hasta cuándo para la gente. La tercera debería ser la vencida para Rayados, que ya vio festejar a sus rivales en dos ocasiones y uno de ellos fue su vecino de la ciudad. 

Hizo la inversión, encontró los jugadores ideales y le salió de la galera un entrenador que nadie daba mucho cuando llegó. Sergio Canales fue el abanderado de este camino, Lucas Ocampos lo acompañó, pero el español necesitará de su compatriota (Torres) y alguno de los delanteros para dar vuelta esto. 

En lo futbolístico, Monterrey no puede permitirse defender de la misma manera que en la Ida. Tampoco regalarse desde el inicio, porque América no es San Luis. El Ame va a salir a ver qué pasa, lo hizo de local, no veo por qué no quiera hacerlo de visita y ganando 2-1. La peor enemiga de Rayados será la desesperación si no cae el gol. 

Esta directiva gastó lo que tenía que gastar, fue a buscar las figuras que se propuso y armó un equipo a la altura de las circunstancias. 

Demichelis se encargará de lo técnico y táctico, la gente jugará su papel en lo emocional. Lo único cierto es que otro Pachuca o Tigres (2016 y 2017) no puede darse.