Martes 01 de octubre de 2024

Tiene 21 años solamente, pero declara y juega como si su trayectoria en el futbol profesional contara con diez temporadas o más. En el último día del mercado de pases arregló su transferencia con Rayados y ONCE pudo platicar con él en exclusiva. La carrera de Fidel Ambriz se ha caracterizado por superarse a sí mismo a partir de competir siempre por el puesto.

En las Básicas del León se topó con su gran amigo Saúl Zamora y Carlos Guerrero, cuando subió a Primera se midió con Luis Montes, Pedro Aquino e Iván Rodríguez y ahora, comparte labores con Jorge Rodríguez y Óliver Torres. ¿Le ayuda en algo? Ser lo que es, de acuerdo a sus palabras.

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"Es una competencia muy sana, desde las categorías inferiores como bien mencionas siempre he tenido compañeros que son muy buenos, me exigen a ser mejor, entonces me ha hecho el jugador que soy. Saúl que es mi gran amigo, Bata que me tocó poco, pero también competí con él, subí al Primer Equipo de 17 años y competir con Aquino, Chapo Montes, Rodríguez fue algo en mi carrera que me hizo mejor jugador y ahora llegar a un equipo con Corcho, Óliver, todos ellos también te va exigiendo más", expresó.

Entre saltos al pasado y el presente, Ambriz analiza las preguntas, sus respuestas y suelta una risa de vez en cuando, como cuando Sergio Canales le grita a lo lejos de forma cariñosa: "Qué guapo".

El mediocentro habló sobre su biotipo como futbolista y se definió como un elemento posicional, agresivo para saltar sobre el rival y que intenta mejorar constantemente con balón, más parecido a Edson Álvarez (disruptor) que a Erick Gutiérrez (organizador).

"Mm, buena pregunta… de estos dos ejemplos más Edson Álvarez siendo disruptor, siendo muy posicional, que corre y es agresivo a la marca, si bien me queda mucho por mejorar, quiero mejor esa parte porque nunca se termina por mejorar. Me considero un jugador posicional, disruptor y obviamente con pelota, uno debe saber, debo mejorar los cambios de juego, intento hacerlo, el disparo de larga distancia a gol me gusta, hoy no se me ha dado en Monterrey, pero de vez en cuando si pateo al arco, se me da bien", apuntó.

EL 5 EN LA CANCHA

Descubierto a los diez años por el profesor Ernesto Ganso Santillán, el nacido en León, Guanajuato ha evolucionado dentro de la cancha. En la actualidad, Martín Demichelis es quien rige el plantel y por ello, Ambriz dio detalles de las cuestiones tácticas que les han pulido los distintos entrenadores que han tocado su carrera.

Ahora que has estado como mediocentro único en el 4-1-3-2 o 4-3-3 del Profe y con Mazatlán en 4-2-3-1 en doble pivote, ¿qué le pide Martín Demichelis a su mediocentro?

"Darle el equilibrio al equipo, ser ese jugador que tiene juntos al ataque con la defensa, si salimos en contragolpe jalar a los defensas para ir juntos, si vamos para atrás jalar a los de adelante. Nos ha dicho mucho eso a Corcho, a mí, a Óliver, a los mismos jóvenes Íker (Fimbres), César (Garza); que la contención es el equilibrio del equipo, no puede estar yendo a las bandas, no puede estar yendo adelante. Si se da la oportunidad, va, pero una o dos veces por partido, que sea el equilibrio por los jugadores de alta jerarquía que tienes adelante, que te pueden hacer un dribling, una jugada y que tú debes estar prevenido para la contra del equipo rival, es lo que nos ha pedido".

Además de tener a Micho, el jugador de 21 años ha tenido al mando a DT’s como Nacho Ambriz, Ariel Holan, Nicolás Larcamón, entre otros. Separando todos sus técnicos en León, Ambriz apuntó cosas que ayudaron a mejorar su futbol.

"De todo un poco, desde Luis Pérez, en Selecciones; en León, con Holan, Paiva, Nachito. Obviamente, le tengo muchísimo cariño a todos ellos. Había veces que te acercabas y tenías una charla íntima con ellos, te decían: 'Tienes esto, pero te falta esto…', 'Te veo bien', 'Te falta mejorar aquí', eso habla bien de los técnicos y todos lo han hecho conmigo.

"Tácticamente con Nacho, como apenas iba subiendo al Primer Equipo, si fue mucho quedarnos después de los entrenamientos a control y pase, perfilarte. Con el Profe Holan habló mucho conmigo porque era ese seguimiento a consolidarme, me decía que hacía bien algo, pero que me faltaba otra cosa, él no controlar con un pie, sino con el otro, corregía mucho eso. Con el Profe Paiva aprendí mucho de lo que era el fuera de lugar, el perfil a la hora de correr hacia atrás, el mismo Larcamón la agresividad, la intensidad que le mete a sus equipos y se caracterizaba por eso, Bava posicional, de todos aprendes algo", añadió.

Te pregunto algo específico del juego, Rayados maneja laterales altos. Cuando el mediocentro ve que el lateral se va y le atacan la espalda, ¿puede ir a la banda o hay otro mecanismo para solventar ello?

"Depende del partido y la decisión del Profe que avance el lateral, muchos técnicos que me han tocado dicen que si avanza el lateral, el central se corre y el contención se mete en medio. Depende el partido, hay veces que nos piden a los contenciones estar más cerca del rebote porque sabes que si un lateral avanza, el otro se queda, pero si los laterales avanzan, el equilibrio tiene que ser el centro, los centrales y al contragolpe estás al pendiente. Depende mucho de la decisión del Profe, del rival y del planteamiento que se dé".

CLÁSICO A LA VISTA

Creciendo con las anécdotas de los cancheros Clásicos del Bajío entre los Esmeraldas e Irapuato, a Fidel le tocó siempre ver de lejos el Clásico Regio y sus aristas. Ahora, con unas semanas por delante para prepararse para su primer Derbi, Ambriz habló de los matices que ostenta el enfrentamiento norteño y sentenció: "Se debe de ganar".

"Si, me tocó de niño, obviamente no me tocó jugarlo, pero hoy en día el Clásico Regio luce más, viste más por lo que ha pasado en los últimos años de los campeonatos de los dos equipos, tiene un sabor distinto para todos y en lo personal por el contexto".

"Me han contado y lo he visto que el Clásico Regio se vive con mucha pasión, entonces ya con muchas ganas de afrontar mi primer Clásico, sé cómo se vive y estoy transmitiendo de cuando es el Clásico, obvio todos los partidos se afrontan igual, pero el Clásico se debe de ganar, se debe de jugar con una pasión sabiendo que es tu oponente de la ciudad, que la gente tiene cariño, afecto, pasión a ese Clásico, eso tratará de hacer Fidel y con muchas ganas de afrontarlo", finalizó.