Lunes 10 de marzo de 2025

Dicen que los cambios son buenos y, al menos, con Nicolás Ibáñez, eso ha ocurrido teniendo a Guido Pizarro como director técnico. De no anotar en 12 encuentros, pasó a ligar dos partidos celebrando, tanto de local como de visitante.

El argentino naturalizado mexicano se deshizo de la malaria en la Ida de Octavos de la Copa de Campeones de la Concacaf contra FC Cincinnati tras ganar un centro de Sebastián Córdova en el área chica en el duelo aéreo con el defensor Teenage Hadebe. Como gesto, el 9 se fundió en un abrazo con su nuevo entrenador, que dejó un apunte sobre él.

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"Nico se encuentra con el gol, es importante para nosotros, por cómo se entrega día a día, por su forma de ser, como nos contagia ese profesionalismo", tiró Pizarro.

En la utilización de los cinco carriles en el campo para atacar, Ibáñez ha encontrado socios para ocupar el área cuando el carrilero (Jesús Garza) busque lastimar por su banda.

Así, siendo un punto de apoyo para progresar desde el pase de Juan Purata, Nico aprovechó el rebote dado por Jorge Hernández, arquero de Querétaro, en el área grande para rubricar su segundo tanto en la era de Pizarro, que valió tres puntos para los universitarios.